ࡱ > '` =p bjbj 8| =h r r r r r r r $ = h , r , , , , r r A h h h , R r r h , h h r r h jɰ ~ h W 0 h q < " q h h v q r ( h z , , ^ , , , , $ $ r r r r r r Necesidad de cambios en la enseanza: El rol del Arquitecto Categorias: HYPERLINK "http://www.revistaca.cl/category/tema-central/" \o "Ver todas las entradas en Tema Central" Tema Central, HYPERLINK "http://www.revistaca.cl/category/numeros/134/" \o "Ver todas las entradas en 134 / Educacin" 134 / Educacin INCLUDEPICTURE "http://www.revistaca.cl/wp-content/uploads/2008/06/134_02_el-rol-del-arquitecto.jpg" \* MERGEFORMATINET por JORGE LOBOS La evolucin de la enseanza de la arquitectura va ligada a la teora de la arquitectura. Debido a que el pensamiento arquitectnico casi no se ha alterado desde la construccin del modernismo, a principios del siglo XX, es difcil pedir cambios a la enseanza, salvo de forma y actualizacin de informacin.Por ello, se debe analizar el momento de la arquitectura actual y su enseanza, a travs de la posibilidad de evolucin que dan los aspectos culturales.Para comenzar, dos datos objetivos y uno emocional: 1. De los 6.600 millones de seres humanos que hoy viven en el planeta(1), dos tercios es decir, 4.400 millones de personas no tienen acceso a ningn producto formal de la arquitectura: proyecto, material, sistema industrializado, profesional, ayuda gubernamental, instalacin elctrica, Internet, etc. 2. En un estudio realizado por el posttulo de asentamientos humanos de la Universidad Politcnica de Madrid, se descubri que slo el 10% de los arquitectos del planeta se dedica al diseo arquitectnico. De ellos, a su vez, solo el 10% se dedica al diseo por encargo, es decir, el 1% del total y generalmente en los sectores ms acomodados del planeta. Esto resulta una gran paradoja, pues gran parte de la enseanza de arquitectura tiene la modalidad del diseo por encargo. De hecho, es suficiente analizar la modalidad de titulacin de la mayora de las universidades en el mundo, donde el proyecto arquitectnico es un edificio. Es decir, estudian un tema que, con suerte, el 10% de ellos lograr aplicar en su vida profesional. 3. Los dos datos anteriores producen el gran sentimiento de frustracin de los estudiantes de nuestras escuelas cuando salen al campo laboral y tambin su baja preparacin para enfrentar las labores profesionales reales. Por qu est gran distorsin con la realidad? A continuacin, un intento de explicar este fenmeno y colaborar en las posibles alternativas de solucin. INCLUDEPICTURE "http://www.revistaca.cl/wp-content/uploads/2008/06/134_01_el-rol-del-arquitecto.jpg" \* MERGEFORMATINET TEORA DE LA ARQUITECTURA ACTUAL La evolucin del pensamiento contemporneo a partir de la antropologa de la cultura (fines del siglo XIX), la filosofa de la cultura (primera mitad del siglo XX), la primera globalizacin (segunda mitad del siglo XX) y la segunda globalizacin (inicios del siglo XXI), ha tenido slo tibios intentos de hacer un correlato con la teora de la arquitectura. En general, la teora de la arquitectura del siglo XX se ha basado en la primera globalizacin, y no ha logrado an incluir en forma consciente estos diversos procesos culturales en la dimensin que plantea la filosofa contempornea. De los muchos textos sobre teora de la arquitectura del siglo XX, se puede obtener una conclusin evidente: la Arquitectura Moderna ha sido el gran movimiento del siglo XX y los intentos ms consistentes de superarla han sido el Posmodernismo y el Deconstructivismo. Hoy existe un cierto eclecticismo conceptual, donde aparecen y desaparecen mltiples propuestas tericas similares o contrapuestas, que intentan avanzar en esta ausencia de ideas totalizadoras. Pero tambin este momento de dispersin tiene en su esencia el valor de la bsqueda, ya que implica una gran libertad terica, como pocas veces ha habido en la historia de la humanidad.Ese eclecticismo sintoniza mejor con la segunda globalizacin mencionada por la filosofa contempornea: aquella de la pluralidad y la coexistencia de los diferentes. Esto a pesar de que la arquitectura an no ha logrado decantar sus propuestas tericas y sintonizar con este momento del pensamiento, lo que se puede dar a travs del estudio de los procesos culturales. CULTURA Y CIVILIZACIN Es muy interesante la definicin que Fernando Savater(2) hace de cultura y civilizacin, porque no los considera trminos contrapuestos, como lo sostenan muchos pensadores sociales en las ltimas dcadas del siglo pasado. Para l, civilizacin es una especie de supracultura que recoge lo mejor de las culturas particulares de cada territorio. Esta reflexin solucion la bipolaridad que se daba en la arquitectura surgida desde Europa, con las ideas de tradicin y modernidad o con las del Regionalismo Crtico de Frampton y tambin, por supuesto, la bipolaridad en las ideas de Modernidad Apropiada de Cristin Fernndez Cox desde Latinoamrica: tradicin versus modernidad, civilizacin versus cultura, localismos versus universalismos. Para Savater, estos son trminos absolutamente imbricados o, dicho de otro modo, civilizacin es sinnimo de la cultura de toda la humanidad. La arquitectura, en consecuencia, debe dar cuenta de esta nueva dimensin. IDEA DEL TOPOS Y CONTEXTO V/S IDEA DE CULTURA Muchos textos se han basado en la idea del topos y/o contexto como soporte de la arquitectura actual. Pero el topos en s mismo es esttico, lo que lo hace dinmico y existencial es la cultura. Lo demuestran los casos donde el topos, por s solo, no es capaz de constituir el proyecto arquitectnico.La ocupacin del lugar, por ejemplo, est mucho ms relacionada con los procesos culturales en la memoria del sujeto que lo ocupa, que con el lugar fsico en s mismo. No es posible construir un proyecto con la sola memoria del lugar (topografa, clima, pluviometra) y sin un sujeto existente.Incluso, en Europa, donde se enfatiza esta nocin del topos como soporte nico desde el cual se puede leer la cultura, se pone en entredicho con los enormes fenmenos de migracin que hoy sufre ese continente. Estos movimientos dan fe de que el topos no siempre servir para comprender todas las aristas de la gran complejidad de la arquitectura contempornea. Actualmente, puede haber territorios ocupados por personas que no pertenecen al lugar o que son nuevos en l, para quienes es ms importante la carga histrica que viaja con ellos y que no los abandonar por dcadas. En esos casos, el topos queda relegado a un escenario donde diversas culturas se mueven en una continua relacin de poder. De igual modo, ocurre con el gran nmero de desplazados en todo el planeta por las denominadas catstrofes humanitarias, producidas por fenmenos naturales, guerras o enfermedades. Estas personas se mueven a lugares muchas veces sin carga urbana previa: desiertos, montaas o campos de refugiados. En esa situacin, a qu debe poner atencin un arquitecto? Sin lugar a dudas, esos desplazados ocuparn el territorio de acuerdo a su particular visin, distinta a si fuera otro grupo de refugiados. No podrn evitarlo, es su conocimiento acumulado y su fortaleza a la hora de subsistir. La experiencia de Mdicos sin Fronteras(3) es sintomtica respecto a este problema. Cito dos casos de ocupacin de territorios similares, ambos en desiertos, que demuestran que el topos, en algunos casos, no alcanza en s mismo a ser la base del proyecto arquitectnico: 1. DARFUR, SUDN: Los refugiados han sido desplazados a territorios desrticos y sin la calidad agrcola que tenan sus propiedades anteriores. Pero saben moverse y de las organizaciones humanitarias solo requieren agua, alimento, medicina y sombra. Cuando esta ltima constituye la vivienda, es lo que Mdicos Sin Fronteras (MSF) y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para el Refugiado (ACNUR) llaman plastic sheeting, que es un plstico blanco o azul de 4 x 6 metros. La vivienda la construyen los refugiados con madera de zonas cercanas, la consolidan con barro y paja, y pueden vivir ah aos, con hospital y escuela aportados por pases desarrollados. Probablemente, esos campamentos sean el germen de una ciudad. 2. LBANO: Tiene diferencias radicales con Darfur, ya que aqu los desplazados tenan un gran poder adquisitivo y las familias podan tener varios automviles. Uno de los principales problemas a que se enfrent MSF fue el estacionamiento y la seguridad que deba tener, pues ocupaba tanta o ms extensin que el campamento. Obviamente, el plastic sheeting, que constituye la primera casa despus de la tragedia, no lograba cubrir el nivel de vida que tenan antes de la emergencia y no era suficiente. Se debi entregar una solucin de mayor complejidad, que incluyera a los automviles. Todos ellos volvieron a sus propiedades una vez acabada la catstrofe humanitaria, por lo cual el campamento no se constituy en una nueva ciudad. Ambos territorios poseen condiciones climticas similares, no tenan ocupacin previa y fueron usados por refugiados. La diferencia era el proceso cultural que traa cada grupo humano y que requera soluciones distintas. Se debera lograr mayor sensibilidad en la arquitectura y su enseanza con los sujetos de distinta cultura que puedan coexistir en la construccin del lugar. Mientras ms complejidad tenga un territorio, ms procesos culturales simultneos ocurrirn en un continuo proceso de sincretismos y separacin. Por eso, en los grupos humanos ms aislados es ms fcil leer su proceso cultural a travs de la forma fsica, aunque no alcancemos a percibir toda su profundidad ancestral, por la distancia que nos separa de ellos. En consecuencia, al producir el proyecto arquitectnico no se puede hacer nfasis solo en el topos, sino tambin estar atentos a la cultura. INCLUDEPICTURE "http://www.revistaca.cl/wp-content/uploads/2008/06/134_03_el-rol-del-arquitecto.jpg" \* MERGEFORMATINET ARQUITECTURA CULTURAL En esta segunda globalizacin, la arquitectura tiene un importante rol en la resignificacin de las prioridades del planeta. Entre estas ltimas, se encuentran: derecho a vivienda digna establecido por Naciones Unidas(4), numerosos desplazados por catstrofes humanitarias, utilizacin racional y democrtica del territorio, sustentabilidad ambiental en los procesos humanos, grandes fenmenos migratorios y los dos tercios de la poblacin mundial que an no tienen acceso a ningn producto formal de la arquitectura.(5) Estos, entre otros, son los problemas que la arquitectura deber enfrentar y para lo cual no son suficientes los parmetros de trabajo que los arquitectos construyeron durante el siglo XX, centrados principalmente en el objeto, la forma del edificio y la arquitectura como arte.Parafraseando al Movimiento Moderno: La forma sigue a la funcin. Hoy podramos agregar: La forma sigue a la cultura. SIGLO XX v/s SIGLO XXI 1. DE LA HOMOGENEIDAD CONCEPTUAL A LA DISPORA TERICA La arquitectura del siglo XX, se caracteriz por la bsqueda de posturas tericas que explicaran el proceso mundial de manera unvoca, es decir, sus procesos tericos siempre eran posibles de ser aplicados en todo el planeta en forma bastante indiscriminada y totalitaria con un discurso nico. Esta postura coincide, por ejemplo, con la poltica del siglo XX, donde socialismo y capitalismo se disputaron la verdad, de forma unvoca y excluyente. Tal es as con el Movimiento Moderno, Posmoderno o Deconstructivista, que son realidades arquitectnicas que se pueden usar en cualquier parte del planeta. Puede no ser esa la bsqueda de sus autores, pero constituye una forma de ver el mundo bastante global, en el sentido primitivo del trmino y con una potente capacidad de irradiar sus ideas. De hecho, uno de los problemas a los que siempre se enfrentaron las arquitecturas del siglo XX, fue el choque que estas posturas tericas tenan con otras realidades humanas que no compartan sus preocupaciones. En consecuencia, se debera pasar de la homogeneidad conceptual que descarta la disidencia, a la pluralidad absoluta y al respeto por la diferencia. Puestas as las cosas, quizs ms que de Arquitectura Cultural, se debera hablar de Arquitecturas Culturales, en plural, todas con diferentes intereses, preocupaciones, tecnologas, habitantes y geografas. 2. DE HOMOGENEIDAD FORMAL A HETEROGENEIDAD DE IMGENES El aspecto formal es donde los arquitectos podemos hacer las mayores diferencias, en especial porque todas las posturas tericas del siglo XX derivaban en una expresin formal muy reconocible. Ellas aludan a una teorizacin que necesariamente deba concluir en un modo de expresin que identificara de manera fsica cada postura y que pudiese darle cuerpo, existencia fsica y poder a un discurso ideolgico. El resultado final fue que las expresiones formales terminaron con un mayor poder de irradiacin y peso que las propias posiciones tericas, pues la forma es posible de ser reproducida en cualquier lugar, sin juicio previo y sin que necesariamente sea consecuencia de un discurso terico. Esto ocurri en diversos pases de todos los continentes, donde la imitacin formal de los procesos que ocurran en las reas llamadas del primer mundo constituyeron, incluso, un sistema de ascenso social o una esttica aspiracional que, a travs de la reproduccin de modelos, pretenda aparecer como lugar desarrollado.Ah las arquitecturas del siglo XX se atraparon a s mismas, pues ese fenmeno que ellas posibilitaron fue tambin su ocaso. De aqu surgieron muchas de las crticas que intentaron superar estos modelos de desarrollo por imitacin, para pasar a la bsqueda de modelos propios que se acercaran en mayor medida a los problemas y preocupaciones especficas de cada lugar. La arquitectura del siglo XXI se puede distanciar radicalmente de las propuestas formales homogneas. De hecho, la Arquitectura Cultural es imposible de reconocer por lo fsico, todas las expresiones de esta postura son diversas, de acuerdo al lugar donde se desarrolla y al grupo humano al que va dirigida. Solo pueden ser reconocidas por la relacin dialgica entre sujeto, historia y topos. Pero esto es imposible de comprender nicamente desde lo visual.Es decir, la Arquitectura Cultural se escapa a todos los preceptos del pasado siglo. Estos se reemplazan por la heterogeneidad formal, la pluralidad conceptual y, finalmente, la imposibilidad de ser aplicada en forma unvoca en todo el planeta. En cada lugar sera necesaria una propia reflexin, lo que en trminos ecolgicos o medioambientales constituye la valoracin de la diversidad o biodiversidad. 3. CAMBIOS EN PROCESOS DE PRODUCCIN DEL PROYECTO La Arquitectura Cultural plantea un cuestionamiento de las formas de produccin del proyecto, por la necesidad de obtener una arquitectura ms cercana a un proceso de representacin social que a la repeticin de cdigos formales. En otras palabras, debe estar ms cercana a un proceso vital que visual, a un proceso que incluya lo tico, ms que lo puramente esttico. Este cambio debera producirse en varias dimensiones. Dos de ellas son: las tcnicas surgidas desde la sociologa o la antropologa y los sistemas de creacin desde el arte contemporneo. INCLUDEPICTURE "http://www.revistaca.cl/wp-content/uploads/2008/06/134_04_el-rol-del-arquitecto.jpg" \* MERGEFORMATINET 4. SISTEMA INCLUSIVO DEL SUJETO Y EL ARQUITECTO COMO SUJETO CULTURAL Tradicionalmente, el arquitecto ha tenido el monopolio del diseo de la ciudad, que se ha conferido por leyes sociales que regulan el sistema de creacin y centran esta accin en su figura. Esto no necesariamente debe cambiar, pero s se debera modificar la forma de enfrentar el proyecto. El arquitecto debera transformarse ms en articulador social o activista cultural, que cree sistemas para incluir de manera ms decisiva en el proyecto la participacin del sujeto que ocupar esos proyectos. Entonces, debera superar la mera creacin de formas, que por alguna mgica razn resuelven los problemas sociales. Cuestin que en los resultados de la arquitectura del siglo XX queda demostrado que no necesariamente es as. Es ms, en muchas ocasiones la arquitectura es productora de conflictos sociales ms que de soluciones, lo cual ocurre especialmente en pases con menor desarrollo econmico y donde el margen para esta tradicional manera de actuar del arquitecto, como creador y artista, es mucho menor. Se podra intentar una mayor participacin de los diversos sujetos en la accin proyectual con sistemas de anlisis ya probados en su eficacia, como las tcnicas etnogrficas y proyectos posibilistas(6), ms que de proyectos conclusos. Esto quiere decir sistemas de creacin abiertos, capaces de responder y ser flexibles a diversos problemas sociales. Con esto, el resultado formal se hace menos preciso, al considerar que la arquitectura es no solo un problema de forma fsica, sino tambin de forma social. Al incluir ms radicalmente al sujeto, se considera a los procesos culturales de los cuales l es portador y nico depositario. La cultura son los sujetos en movimiento y, en la medida que se puedan comprender sus preocupaciones, se estarn tocando las fibras ms ntimas de la cultura. En estos sujetos tambin est el arquitecto como expresin del proceso cultural y, por lo tanto, en la medida en que ms se abra el proyecto y ms profesionales participen de l, se evitar el autoritarismo desptico de la creacin hermtica y endgena del arquitecto. Este ltimo podr ser incluido como sujeto que posee un cierto conocimiento til para materializar la cultura. As, se tendr ms posibilidades de acercarse a respuestas certeras a la hora de hacer una arquitectura de la cultura, aunque los objetos sean menos perfectos que en los cnones establecidos en el siglo XX. 5. CREACIN COMO ACTO COLECTIVO Los sistemas de creacin planteados desde el arte, como los procesos abiertos, citados por Joseph Beuys(7) al decir cada hombre, un artista, al apelar a la autodeterminacin poltica y artstica, y al concebir el arte como el sistema de evolucin humana, son elementos de los cuales puede aprender el proceso de produccin arquitectnico. Dentro de esos mtodos, tambin se pueden citar las ideas de John Cage(8), cuando habla de sistemas de azar -similares a los que plantea Duchamp-, o la imperfeccin o los ejercicios indeterminados, inconclusos y abiertos, para la inclusin del sujeto como parte de la creacin.Un sistema abierto hace que el autor, arquitecto, no controle todo el proceso. Esto produce mucho temor en el creador, pues l mismo se autoconfiere ciertas capacidades superiores de comprensin de la realidad que no son posibles de compartir con los ciudadanos comunes. Esta actitud muchas veces obedece ms al mantenimiento del estatus social del arquitecto, que a una bsqueda de contribuir en la solucin de los problemas sociales. Este temor tiene que ver tambin con la autoimpuesta necesidad de hacer un objeto de arte. Obviamente, el control del diseo del objeto tiende a buscar una perfeccin inexistente. Se supone que al abrir el sistema se tendrn menos posibilidades de llegar a esa utpica perfeccin, por lo tanto, el arquitecto vuelve a su rutina privada y hermtica de creacin. En la Arquitectura Cultural es posible considerar la imperfeccin como parte del sistema de creacin y la inclusin de sujetos como parte del azar, as muchas veces no se sabr en qu terminar un proyecto, slo se podr presuponer un conjunto de reglas que oriente el proceso con final indeterminado. INCLUDEPICTURE "http://www.revistaca.cl/wp-content/uploads/2008/06/134_05_el-rol-del-arquitecto.jpg" \* MERGEFORMATINET 6. REACERCAMIENTO A LA SOCIOLOGA Hablar del abandono de las lgicas de composicin, por proyectos posibilistas y abiertos, y de la inclusin del sujeto como almacn cultural, no quiere decir abandonar la arquitectura como arte, sino ms bien ponerla en un camino intermedio entre arte y sociologa. Actualmente, la arquitectura ha tenido un enorme desarrollo de soluciones y variantes formales para el proyecto: algoritmos, teora de fractales, teora del caos, procesos matemticos y apoyo de nuevas tecnologas. El conflicto es no haber tenido la misma capacidad para desarrollar la posibilidad de enunciar los problemas sociales, no haber creado o sabido utilizar sistemas para su anlisis y descubrimiento. Esto ltimo ni siquiera es materia de estudio sistemtico en la gran mayora de las escuelas de arquitectura del mundo. La composicin, la esttica, el objeto y la idea del arquitecto como artista siguen siendo los modos de enseanza. Por lo tanto, es una disciplina absolutamente coja. Resulta evidente la necesidad de poner a la altura ambos procesos y buscar una proximidad al mundo de la sociologa o antropologa, donde s han desarrollado sistemas de comprensin de la realidad. Este cambio requiere comprender el oficio como una disciplina de servicio social, no slo como un arte, donde el compromiso con el desarrollo cvico es voluntario. Este cambio es radical a la hora de enfrentar un proyecto y la enseanza, pues plantea la arquitectura como un sistema de resolucin de problemas ciudadanos, no solo de forma fsica, sino ms bien social. Esto puede servir enormemente a la arquitectura, pues saca el problema de la mera forma, para llevarla al plano de las significaciones, de la cual obviamente la forma es solo el producto final y libera tambin a los arquitectos de la reproduccin formal como sinnimo de cultura.Lo importante es comprender la cultura como produccin de sentidos de la vida cotidiana. Si se quiere conocer la cultura de un grupo determinado, en realidad se est preguntando qu sentido tiene la vida para ese grupo. El siguiente problema que se enfrenta es cmo averiguar ese sentido de la vida en la prctica vivida por sus actores, un tema sustancial para la arquitectura y muy difcil de resolver al producir un proyecto. Pero ah las ciencias sociales llevan camino adelantado y pueden ser de gran utilidad.Cada grupo humano tiene un significado para cada cosa del hacer y el quehacer, de manera que ellos tienen solo las connotaciones que ese grupo humano particular les da, pudiendo ser parecidos a los de otro grupo, pero nunca iguales en su completa totalidad. La cultura de cada grupo humano es como su huella digital y no existen dos de ellos que tengan la misma. 7. ARQUITECTURA Y POLTICA Esta postura arquitectnica refleja lo que en filosofa se llama segunda globalizacin(9) y, en poltica, movimientos altermundialistas. Estos ltimos son grupos heterogneos que tienen como raz comn el respeto por las diferencias. Por lo tanto, son un freno a un mundo imperial homogneo, sin pretender eliminarlo, sino buscando la coexistencia, cuestin novedosa para la actitud ideolgica del siglo XX, donde en poltica las posturas conceptuales pretendan imponerse unas a otras en la polaridad capitalismo-socialismo. La democracia como valor de participacin es un elemento posible de usar a la hora de producir un proyecto, porque tambin tiene consigo el germen de la autodeterminacin y, por lo tanto, buscar tcnicas que la hagan posible en la arquitectura es una necesidad del tiempo que vivimos. Las personas tienen opinin respecto de la ciudad y sus viviendas, que son absolutamente necesarias de valorar y considerar en los proyectos de arquitectura.Es necesario modificar el proceso de produccin del proyecto, incluyendo otras variables que posibiliten una relacin ms adecuada entre el producto final de la arquitectura y sus ocupantes. La democracia como valor de participacin es un elemento posible de usar a la hora de producir un proyecto. 8. MS ROLES AL OFICIO DE ARQUITECTO La posibilidad de entregar ms roles al oficio del arquitecto o potenciar ciertas capacidades que han sido relegadas en las ltimas dcadas, puede ser una tarea urgente y necesaria para concebir otros caminos para la arquitectura.Esto implicar necesariamente un cambio en los sistemas de enseanza de la arquitectura, en especial en los pases en desarrollo y en aquellos ms pobres. En esos lugares sirve de muy poco la enseanza tradicional y academicista del arquitecto como diseador de edificios y ligado exclusivamente al arte, pues es muy usual que no disee un solo edificio en toda su vida. Se debe abrir el espectro de enseanza a otras dinmicas de comprensin de lo arquitectnico y a otras lgicas de construccin de las ciudades, donde el arquitecto sea tanto un activista cultural como un artista. PROPUESTAS A partir de estas ideas, propondra un taller de arquitectura con solo dos preguntas: 1. Los alumnos deben salir a la ciudad y al territorio a buscar problemas sociales, sin tema previo y sin encargo. 2. Estos problemas deben ser posibles de resolver dentro de la disciplina de la arquitectura, en el ms amplio sentido del concepto.Luego, un mtodo de trabajo con un solo criterio: la produccin del proyecto es un acto de creacin colectivo, donde las ideas son patrimonio del total del grupo y pueden ser utilizadas por cualquiera, como un lpiz, un papel o una mesa. Lo importante es cmo se desarrollan esas ideas y se transforman en una solucin a un problema social. 1. SALAS, Julin, Director Posttulo de Asentamientos Humanos, ETSAM. Madrid, 2000.2. SAVATER, Fernando. Universalismo e identidades / civilizacin versus cultura, Conferencia en Escuela Tcnica Superior de Arquitectura de Madrid, ETSAM 22/02/1999.3. PIFERRER Garca, Raimon. Responsable logstico, Unidad de emergencias MSF reunin 13 abril 2007, Barcelona, 2007.4. ASAMBLEA GENERAL DE LAS NACIONES UNIDAS, Declaracin Universal de los Derechos Humanos, 10 de diciembre de 1948.5. SALAS, Julin, Director Posttulo de Asentamientos Humanos, ETSAM, Madrid, 2000.6. AMPHOUX, Pascal. Convocatoria Europan VI, Editorial Europan, Comunidad Europea, Suiza, 2001.7. BODENMANN, Ritter Clara, Josephs Beuys. Cada hombre, un artista. Editorial Antonio Machado, Conversaciones en Documenta 5, Kassel, Alemania, 1972.8. KOSTELANETZ, Richard, Conversing with Cage, Limelight editions, New York, 1988.CHARLES, Daniel, Paral los pjaros. Conversaciones con John Cage, Montevila editores, Caracas, Venezuela, 1981.9. SAVATER, Fernando, Universalismo e identidades. Civilizacin versus cultura. Conferencia en ETSAM, Madrid, 1999. JORGE LOBOSArquitecto, U. de Chile. MA Teora y Proyecto, U. de Catalua, Espaa. Premio Arquitecto Joven Colegio Arquitectos de Chile 1994. Acadmico de la U. de Chile y de la U. de Sassari, Italia. Reside en Copenhague, donde es profesor visitante de la Royal Danish Academy y desarrolla trabajos en Chile, Espaa, Dinamarca e Italia. Actualmente, trabaja en el proyecto acadmico internacional Housing and Culture. H I , - < = > ? U V ? U A - - J. K. L. M. N. c. 1 2 C C ~C C C C S S tT uT vT wT g g ^m m n n